Convéncete que no eres lo que por muchos años te han hecho creer que eres.
Eres más que una estructura física, más que un ser humano viviendo una experiencia tridimensional.
Ya es hora de Despertar del largo sueño de creer que estás limitado a nacer, vivir y morir como punto final de tu existencia.
La existencia es eterna, por lo tanto no tiene principio ni final.
La muerte es solo un invento para engañar, no es una realidad, es una ilusión que solo existe en la mente del hombre.
Debes convencerte que tu origen es más que átomos, células, moléculas, tejidos y materia orgánica.
Tu origen es Espiritual, Energético, Solar, Sideral, Galáctico, Universal, Cósmico y Divino.
Todo lo que existe fue creado por medio de luz, vibración, sonido, frecuencia, energía, y eso es lo que eres. Por esta razón, la energía se puede transformar a través de tus pensamientos porque perteneces a ella.
Eres Polvo de Estrellas, Chispa Divina, Punto de Luz.
Eres una Semilla Cósmica que nunca deja de germinar, crecer y evolucionar.
Debes convencerte y creer que eres Alma y Espíritu.
Debes convencerte que tu esencia, sustancia e ingrediente primordial es la energía, frecuencia y vibración del Amor.
Por tales razones, eres Amor y tienes el máximo poder que te otorga la Fuente Creadora y Divina en ti.
Debes convencerte que eres creador y cocreador de tu realidad, por consiguiente, evita que otros pretendan crear por ti y controlar tu vida.
Debes convencerte que eres un Ser de Luz Espiritual dotado de cualidades especiales y únicas, que eres capaz de transformar la realidad que estás viviendo actualmente y adecuarla a tus necesidades primordiales.
Dispones del libre albedrío, el discernimiento y la magia en ti para lograrlo.
Debes convencerte que eres el mago, el arquitecto, el diseñador y constructor de lo que ves a tu alrededor.
Todos lo que miras en el exterior, te guste o no, es la proyección y el reflejo de cómo estás resonando dentro de ti.
Si deseas cambiar el mundo desde afuera, lo más probable es que nunca lo logres y quedes agotado.
Si inicias los cambios dentro de ti, verás como todo lo que está afuera comienza a transformarse a tu favor.
Eres un Ángel en la Tierra, un Alma que está aquí para aprender de las experiencias terrenales como ser humano, no como Ser de Luz que ya eres por naturaleza divina.
Convéncete de una vez que eres un Dios en miniatura, pero eso sí, con humildad y sabiduría, sin olvidar que para que tus dones se hagan presentes, debes estar eternamente vibrando en las Aguas Eternas y Cósmicas del Amor Divino.
