Ser canal o canalizar significa tener la habilidad para descodificar y transmitir información desde un emisor que no está presente físicamente o no está en la misma frecuencia vibracional.
En tiempos remotos el ser humano era consciente de su capacidad para comunicar con otras consciencias y esta habilidad formaba parte del día a día.
Pero la capacidad para "ser canal" equivale a la de ser una estación de radio que conecta con una o varias longitudes de onda (hacer de médium es utilizar una única longitud de onda).
Hay un abanico bastante amplio de niveles vibracionales con los que el ser humano puede intercambiar información, y digo intercambiar porque una canalización puede ser tipo monólogo o ser interactiva. La interactividad y el dialogo tienen la ventaja de que permiten resolver dudas y disipar malentendidos.
A sí, en una canalización hay tres elementos:
1. el Canal,
2. el Público
3. El Ser canalizado.
Para participar como público en una canalización (individual o colectiva) no hay grandes reglas excepto el respeto y la voluntad de mantener la mente abierta.
Aunque es bastante evidente, cabe destacar que el canal será determinante para que la canalización sea una experiencia enriquecedora o sea todo lo contrario.
La calidad del canal, su energía, su grado de conciencia, su luz, su fuerza, son claves. No es infrecuente que un ser canalizado quiera hacerse pasar por lo que no es (tal y como pasa cuando se chatea por internet). El canal debe tener siempre la capacidad para seleccionar al ser canalizado y mantener el control sobre cualquier circunstancia.
Por otra parte una información canalizada debe siempre "pasar por el filtro de la conciencia del que escucha", haciendo uso de nuestra propia capacidad de discernimiento. Este filtro se debe aplicar desde el corazón ("la verdad siempre está en el interior"), y no desde la mente (ego) que tenderá a aceptar sólo aquello que le gratifique (en positivo o en negativo) o confirme sus posicionamientos.
En una canalización cada persona recibirá un mensaje y una energía que será personal y circunstancial.
Conciencias elevadas o consciencias de luz
Vamos a enumerar solo algunas consciencias que pueden ser canalizadas y que consideramos deben ser citadas.
La Fuente
Toma ese nombre aunque podría utilizar otros que tampoco lo definen en su globalidad aunque son más utilizados (Padre, Todo poderoso, Dios,...).
Muchos humanos piensan que es descabellado utilizar un canal para hablar con el creador de este universo. Es posible que piensen que esta conciencia o energía es propiedad de unos pocos. Aún hay personas que piensan que la Fuente es un ser despiadado y castigador. Poco importa, la realidad es que la Fuente siempre se muestra abierta a hablar con nuestras consciencias terrenales, su paciencia es infinita, su humor excelente, gusta de hablar de cosas totalmente mundanas y terrenales.
Grande, y totalmente normal, es la tentación de pedirle cosas o que cambie situaciones. La Fuente siempre escucha pacientemente. En ciertos casos dice cosas que son difíciles de valorar en su justo peso. Indudablemente suele hacer mella en la mente del que escucha porque tiene la capacidad de leer nuestros corazones.
Puedes rebelarte y hasta negar todo lo que dice, porque la Fuente nunca pierde la compostura y no sabe de enfado, ni castigo. Aunque es más bien frecuente que el público sienta paz y amor ante su presencia, y eso es realmente agradable.
Ser Superior
Nuestro ser superior es nuestra esencia más espiritual, nuestra replica original, es nuestro nivel de consciencia más elevado. En resumidas cuentas eres tú mismo sin las limitaciones humanas.
Normalmente se comunica con nosotros (nuestra consciencia terrenal) a través de la intuición, a través de los sueños, o incluso a través de un canal...
En la vorágine del día a día, a menudo nuestra mente ha creado un escenario totalmente ficticio a nuestro alrededor. Nuestro ser superior se manifiesta para mandarnos un mensaje de claridad, ánimo y luz. A veces es contundente, porque no estamos muy dispuestos a escuchar su mensaje; a veces es dulce, porque sabe lo "complicado" que nos está resultando crecer a pesar de todas nuestras buenas intenciones. Tu Ser Superior eres t sin miedos, sin límites.
Ser Guía
A veces nuestros seres queridos en la tierra vuelven a nosotros tras su muerte física, nos guían y nos acompañan, nos aportan paz, energía positiva y consejo. Otras veces son "seres de luz" los que nos acompañan.
Se les denomina "de luz" para diferenciarlos de los seres de bajo astral, pero lo que realmente les diferencia es su elevado nivel vibracional. En esencia son los seres superiores de personas que han encarnado o la conciencia de otros seres "elevados" que no han encarnado nunca.
Algunos maestros ascendidos (seres espiritualmente iluminados) nos acompañan a diario.
Sus mensajes son siempre de aliento. Libres de la dualidad les es relativamente más fácil discernir entre lo que nos ayuda en nuestro camino y lo que nos entorpece.
Conciencias terrenales
Todas las conciencias que han encarnado pueden ser canalizadas. Las personas que están en vida actualmente, las conciencias de personas que han vivido en tiempos pasados (sin límite temporal), las personas que han convivido con nosotros en nuestra vida actual o en vidas pasadas, incluso las conciencias terrenales de nuestras anteriores encarnaciones.
Personas en vida
Un ser humano es la suma de varios cuerpos, el físico, el mental, el emocional y el cuerpo de luz o alma. La personalidad de una persona está fundamentalmente marcada por su mente y sus emociones, y es esta parte la que puede ser canalizada. No es realmente una comunicación telepática porque la otra persona no es consciente de la canalización, pero se le asemeja.
Ser desencarnado
Un ser desencarnado es una conciencia terrenal porque sigue inmerso en la dualidad. Es un rastro electromagnético de la persona en vida, que mantiene los sentimientos y pensamientos de su "realidad personal" y de su época.
Tras la muerte física de una persona, su personalidad puede no ser consciente de su nuevo estado o puede "decidir no ir hacia la Luz" y permanecer en lo que solemos llamar "a medio camino". El miedo suele ser la motivación primera de permanecer en este impass: miedo a ser juzgado, miedo a perder a sus seres queridos o a dejarlos desprotegidos, miedo a perder algo terrenal ..
"Ir hacia la luz" no es sino entrar en otro estado del Ser.
Los seres desencarnados están atados a la tierra, atascados en el ayer y ni siquiera hay un mañana para ellos. No son seres malos, o no más malos de lo que fueron en vida, ni siquiera se les puede considerar dañinos. Hacen cosas insidiosas, solo están repitiendo, en un bucle, sus últimos días, una y otra vez
Como su nombre lo indica son las consciencias de los seres que vivieron en Gaia pero que ya no tienen un cuerpo físico.
El "fenómeno fantasma" se produce cuando una persona entra en contacto o resuena con el espectro emocional o mental de un ser desencarnado. Dicho de otra forma, los fantasmas dan miedo porque lo primero que sientes es el propio miedo del ser desencarnado o del "alma en pena"
Si se canaliza a uno de estos seres, lo más oportuno es hacerles tomar consciencia de su "nueva situación" (hay ciertos trucos como que se miren los pies) e invitarles, siempre respetando su libre albedrío, a "ir hacia la luz". Hacerles saber que hay seres queridos que les están esperando y que tras un tiempo podrán volver como "seres guía".
Permanecer en este estado de penumbra, a veces incluso con propósitos tan loables como ayudar o proteger a su familia, no les aporta nada. Algunos intentarán o necesitarán "robar" energía a sus seres queridos. El culto a los difuntos o a los ancestros lleva a veces a situaciones "desafortunadas" si no se ha comprendido lo antes descrito
Conciencia de una vida pasada
Todas las personas que han encarnado dejan su impronta energética en Gaia (en los registros akáshicos).
En determinadas circunstancias estas consciencias pueden ser canalizadas para que alguien del público entienda o comprenda algo que arrastra de sus vidas pasadas como un lastre emocional.
Conciencias de bajo astral
Los seres de bajo astral también pueden ser canalizados.
Lo más adecuado es cerrar el canal a estos seres, a menos que exista una razón pedagógica (lo que sucede rarísimas veces).
Falsos guías o falsos seres de luz
Algunas veces los seres de bajo astral (de baja vibración) se hacen pasar por "seres de luz", "se visten de blanco" por así decirlo y dicen "bonitas palabras". Es frecuente que intercalen mensajes tóxicos o falsos entre verdades para disimular su verdadera identidad. Si el canal lo permite pueden llegar a mantener a toda una audiencia convencida de ser algo que no son, aunque muy a menudo sus palabras o los sentimientos que reflejan les delata (miedo, inseguridad, frustración, ...).
Seres de bajo astral
Hay seres, consciencias, ancladas en la zona más densa del plano astral. En el plano evolutivo son seres que tienen muchas cosas que aprender sobre la luz, el amor y la libertad. Se nutren de las emociones y pensamientos de más baja frecuencia y por eso resultan tan tóxicos.
No hay que creerse todo lo que se dice sobre las posesiones y el poder de los seres de bajo astral. Su vulnerabilidad ante la luz y la energía del amor es muy patente, pero tienen mucha inventiva y pueden mostrarse muy convincentes o seguros de sí mismos.
Otras conciencias
El ser humano tiene tendencia a creer que está sólo, pero hay multitud de seres (energía y conciencia) a su alrededor.
Seres sutiles
En la literatura fantástica encontramos muchos seres que parecen simplemente surgir de la imaginación de algún escritor. Lo que permanece oculto es que la imaginación es un portal a dimensiones que cohabitan parcialmente con nosotros. Estos seres sólo son visibles para algunos humanos, aunque forman parte de Gaia al mismo título que los seres humanos.
Su particular cuerpo les impide una interacción más perceptible en nuestro plano físico y de hecho tampoco estamos entre sus centros de interés. Aunque probablemente, en un futuro no muy lejano, cuando nuestro grado de conciencia abra nuestras mentes a nuevas realidades, esto pueda cambiar.
Sus mensajes suelen ser breves. Sin nuestras limitaciones, tienen una visión de nosotros mucho más elevada de la que tenemos nosotros mismos.
Extraterrestres
También encontramos canales con seres que no tienen un origen terrestre. Algunos extraterrestres comparten con nosotros nuestro objetivo evolutivo, nuestros genes e incluso nuestro futuro.
Sería bueno recordar que la ciencia ficción suele utilizar el tema extraterrestre para sembrar miedo y desesperanza. Destacar que la realidad desmantela las teorías conspirativas y que nuestro poder como "simples seres humanos" - que no reside en la tecnología - supera con creces el de muchos llamados "seres de las estrellas".
LA CANALIZACION
La Canalización es una forma de comunicación entre humanos y otros seres, usualmente de las dimensiones altas. Estos seres pueden ser seres angelicales, de naturaleza espiritual, espíritus de seres queridos que han partido, entidades extraterrestres, o aún de animales y mascotas. Un canalizador es similar a un traductor o intérprete. Ellos permiten a sus cuerpos sentir o percibir la comunicación proveniente de otro ser. El canalizador entonces adjunta palabras humanas a las comunicaciones para el propio entendimiento o el de otros humanos.
Algunas personas sienten miedo de canalizar porque no comprenden el proceso, o piensan que una entidad oscura pude venir. Pero el canalizador siempre tiene a su elección a quien o que desean canalizar. El canalizador puede insistir en saber el nombre y orígenes de cualquier entidad o ser angélico que desee comunicarse con ellos.
Canalizadores experimentados comprenden que el solo hecho de que una entidad quiera comunicarse no significa necesariamente que la entidad está iluminada. Los canalizadores deben discernir por sí mismos el nivel de iluminación de la entidad, y el valor de su información. Algunas entidades solamente quieren conversar, otras tienen una agenda, y también hay muchas entidades que tienen el deseo de proveer una guía iluminada y consejo.
Canalizadores experimentados comprenden que el solo hecho de que una entidad quiera comunicarse no significa necesariamente que la entidad está iluminada. Los canalizadores deben discernir por sí mismos el nivel de iluminación de la entidad, y el valor de su información. Algunas entidades solamente quieren conversar, otras tienen una agenda, y también hay muchas entidades que tienen el deseo de proveer una guía iluminada y consejo.